Toques de Río, fundada en Pinar del Río en marzo de 2002, es una agrupación que defiende la música alternativa y cuyo propósito ha sido darle continuidad a la obra de relevantes personalidades como Benny Moré, Rita Montaner y Bola de Nieve.
Es muy popular entre los jóvenes que los vieron nacer, pero han logrado ampliar sus fronteras y reunir a un público heterogéneo que los vitorea en cada una de sus presentaciones.
Toques de Río, desde Pinar para el mundo
Han transcurrido quince años desde que el bajista Zeney Alonso decidiera fundar una agrupación integrada por talentosos y jóvenes músicos, todos miembros de la Asociación Hermanos Saíz (AHS): Toques del Río.
Cuenta en su nómina con bajo eléctrico, piano, guitarra eléctrica, timbal, batería, trompeta y saxofón. Además, los acompañan un tenor, un barítono y un alto.
La agrupación en sus inicios cultivaba la música flamenca mezclada con los ritmos cubanos y, si tenemos en cuenta su formación académica, esta tendencia era lógica: todos son graduados de la Escuela de Ballet Flamenco de Cristina Hoyo, en la sede del Ballet Lizt Alfonso. Poco a poco, con soltura y desenfado, han logrado obtener nuevas e increíbles sonoridades.
Al escuchar cualquiera de sus composiciones estaremos disfrutando del mambo, el feeling, la trova, el son, el danzón, la conga, la rumba y el guaguancó, mezclados sabiamente con el rock, funkie, blues, bossa nova, el jazz norteamericano, la polka rusa, el tango y la rumba flamenca. Sin duda, es algo asombroso lo que consiguen estos muchachos de Toques del Río.
Hasta el momento cuentan con dos fonogramas. En Pa´ que te sosiegues, su ópera prima, incursionan en varios estilos donde reverencian a figuras tan legendarias e inigualables como Pérez Prado, pero, además, son capaces de pasearse desde Los Van Van hasta Michael Jackson.
Las cosas que prefiero, su segunda propuesta, contiene ocho temas, donde resalta un cuidadoso trabajo musical. Títulos como Dame alas, Las cosas que prefiero, Ligero y versiones contemporáneas de temas antológicos como Veinte años, deleitan el oído.
Pero otros proyectos mantienen muy activos a los integrantes de Toques del Río, como, por ejemplo, la banda sonora La Casa de Bernarda Alba y la musicalización de textos de una de las voces líricas más prodigiosas de la Isla: Dulce María Loynaz.
El fatalismo geográfico nos ha perjudicado
Toques de Río, después de 14 años de fundada, ha sido finalmente reconocida fuera de su provincia. Ya el público puede disfrutar de sus presentaciones en el Pabellón Cuba, ubicado en una de las zonas más céntricas del Vedado capitalino, y en espacios televisivos como Cuerda Viva. En la gala anual de este programa fueron seleccionados como Mejor banda Fusión 2015.
A pesar de todo, los integrantes del grupo reconocen, que la tierra vueltabajera ha aportado mucha energía y todo su apoyo a este emprendimiento cultural.
“Gracias a interminables horas de estudio y ensayo, y a haber aprendido de nuestros errores, hemos llegado a este momento”, refieren con gran modestia. “Por otra parte nos nutrimos de Ñico Saquito, Pedro Junco, Benny Moré, Polo Montañez, Buena Vista Social Club, Michael Jackson, Stevie Wonder y Earth, Wind & Fire, por solo mencionar algunos”.
Según los especialistas la proyección en escena, la gracia y el carisma, la originalidad de sus integrantes y el estilo cubanísimo, hacen de Toques de Río una de las propuestas más sorprendentes de los últimos años.
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