Son numerosos los estudios que han corroborado la importancia para el desarrollo infantil de recibir clases de música. Mucho más que el beneficio presente y futuro de poseer la habilidad de tocar un instrumento, la música incrementa en los pequeños el rendimiento escolar.

Este efecto es realmente extraordinario: recibir clases de música estimula áreas del cerebro relacionadas con el aprendizaje, mejora la concentración, desarrolla la memoria, incrementa la capacidad de análisis, potencia el poder de síntesis y entrena las habilidades de razonamiento en los niños.

La mejor de las actividades extraescolares

Aunque el sistema educativo de muchos países lleva incorporado la instrucción musical en algún momento de sus programas, si su hijo tiene aptitudes para la música es conveniente que se plantee muy en serio apuntarlo a clases de música.

Además de las ventajas ya enumeradas, los chicos que reciben lecciones de música como actividad extraescolar mejoran también su comportamiento en otras esferas de la vida. Aprender a tocar un instrumento y hacer música por ellos mismos desarrolla en los niños la inteligencia emocional, por lo que los pequeños tienden a socializarse mejor y desarrollan la empatía.

Otro punto a favor de las clases de música es que estas refuerzan la expresión de los peques: la música es también un código de comunicación. Asimismo, aprender a hacer música con un instrumento desarrolla la coordinación motora en el cerebro.

¿Cuándo está listo el niño para recibir clases de música?

Cuanto más pronto, mejor. Muchos estudios señalan que comenzar a familiarizarles con la música desde edades preescolares les ayuda a desarrollar su cerebro en cuatro aspectos fundamentales: seguridad, aprendizaje, concentración y expresión corporal.

Una vez que el niño se incorpore a la escuela, ya está listo en teoría para comenzar a recibir sus primeras clases de música. Estas, por supuesto, tienen como objetivo detectar hasta qué punto el niño tiene no solo actitudes para la música, sino además la actitud correcta para su aprendizaje.

En la misma medida que recibir clases de música puede tener un efecto beneficioso para su hijo, si el niño no está interesado en ella y lo ve como un castigo no podrá sacar provecho del aprendizaje de la música.

Tenga en cuenta que dominar un instrumento requiere de paciencia, constancia y largos años de práctica. Si el niño no está realmente motivado por recibir clases de música, incorporar esta actividad extraescolar a su vida no le aportará los beneficios esperados.

Havana Music School le ayuda a descubrir el talento

Si considera que su hijo posee el talento necesario para aprovechar las clases de música, nosotros le ayudamos a comprobarlo. Nuestra escuela se precia de contar con profesores de vasta experiencia en la enseñanza musical de todas las edades, pertenecientes a las más prestigiosas academias e instituciones de nuestro país.

Nuestra sede en Calle 28, en la barriada del Vedado, cuenta también con aulas insonorizadas y climatizadas donde el alumnado recibe una atención personalizada, para que su hijo pueda desarrollar el máximo de su potencial.

El horario y la frecuencia de estas actividades extraescolares los decide usted, así que no dude en contactarnos si desea recibir más información sobre nuestras clases de música para niños.